Contenidos
El burro no se ha extinguido
En algunas zonas del mundo, los equinos de trabajo son la base de la estabilidad financiera y un importante medio de transporte para familias que, de otro modo, estarían sumidas en la pobreza. Ayudan a recoger las cosechas, transportan agua, llevan a los niños a la escuela y llevan los alimentos al mercado. Por desgracia, algunos de estos equinos de trabajo se han convertido en el objetivo de un devastador comercio internacional que está diezmando su población y llevando a la quiebra a familias de toda África y América Latina.
Durante miles de años, los burros han sido sacrificados en toda China para fabricar ejiao (eh-gee-yow). Esta gelatina dura, curada a partir de la piel de burro procesada, se suele disolver en productos de belleza, alimentos y bebidas. A pesar de no existir pruebas científicas, se cree que el ejiao aumenta la circulación sanguínea y puede tratar problemas de salud como la anemia y los problemas reproductivos. Sin embargo, la demanda de ejiao en China ha superado con creces la oferta. Según un estudio de The Donkey Sanctuary, desde 1992 el número de burros en China se ha reducido en un 76% y se espera que la población mundial de burros disminuya en más de un 50% en los próximos cinco años. Si las tendencias actuales persisten, los burros podrían extinguirse en 15 años.
¿Están las mulas en peligro de extinción?
La piel del animal de carga se utiliza para producir ejiao, un elixir capaz de curar el insomnio, la fatiga crónica, la anemia y potenciar la libido. La población de burros en China se ha reducido en pocos años. En África se ha reducido a la mitad en otros tantos años. Para producir 5.000 toneladas de ejiao (la necesidad anual en China) se necesitan 4 millones de pieles.
En un reportaje publicado por Le Monde, un farmacéutico chino explica: “La utilizamos para hacer un jarabe llamado ejiao. Con la gelatina que se encuentra en la piel del burro, hacemos un tónico que puede eliminar todos los males como la anemia, la tos seca o las consecuencias de la menopausia. Pero también el insomnio o la fatiga crónica. Es un medicamento que utilizamos en China desde hace varios años”.
La creciente demanda de este medicamento ha reducido a la mitad la población de burros en China, que ha tenido que abastecerse de cuero y carne de burro desde África: Níger y Burkina Faso han prohibido la exportación tras la reducción de los ejemplares, utilizados por los ganaderos. Kenia, que mantiene importantes relaciones comerciales con China, ha permitido la venta. Aquí, los burros han pasado de 1,8 millones en 2008 a 900 mil en 2017. El precio de los burros ha subido hasta 150 euros por cabeza. Una cifra que los ganaderos locales no pueden pagar.
Población de burros
Lo que desencadenó el estudio de investigación encargado por Brooke India, el capítulo local de LA organización benéfica internacional de equinos con sede en el Reino Unido, fue una drástica disminución de la población de burros en todo el país. Desde el censo ganadero de 2012 hasta el último censo ganadero de 2019, la población de burros se había reducido en un 61,23 %.
La hipótesis del ejercicio era que China es culpable, directa e indirectamente, de la caída de la población de burros no solo en la India, sino en todo el mundo, ya que la piel de burro (piel) se utiliza para la fabricación de Ejiao, una medicina tradicional china.
El ejiao es una gelatina de piel de burro o un pegamento de piel de asno que se obtiene de la piel de un burro mediante su remojo y cocción. El Ejiao es un ingrediente para tratar diferentes tipos de enfermedades, como hemorragias, mareos, insomnio y tos seca. También es una moda para la salud, ya que se cree que prolonga la vida, aumenta el deseo sexual y mantiene la belleza. Y de ahí que se haya producido una explosión de la demanda en la creciente clase media china. Varios estudios anteriores, realizados en varios países, mencionan categóricamente que la creciente demanda de pieles de burro en China para el Ejiao ha dejado a la población mundial de burros en crisis.
Ejiao
Lo que desencadenó el estudio de investigación encargado por Brooke India, el capítulo local de LA organización benéfica internacional de equinos con sede en el Reino Unido, fue una drástica disminución de la población de burros en todo el país. Desde el censo ganadero de 2012 hasta el último censo ganadero de 2019, la población de burros se había reducido en un 61,23 %.
La hipótesis del ejercicio era que China es culpable, directa e indirectamente, de la caída de la población de burros no solo en la India, sino en todo el mundo, ya que la piel de burro (piel) se utiliza para la fabricación de Ejiao, una medicina tradicional china.
El ejiao es una gelatina de piel de burro o un pegamento de piel de asno que se obtiene de la piel de un burro mediante su remojo y cocción. El Ejiao es un ingrediente para tratar diferentes tipos de enfermedades, como hemorragias, mareos, insomnio y tos seca. También es una moda para la salud, ya que se cree que prolonga la vida, aumenta el deseo sexual y mantiene la belleza. Y de ahí que se haya producido una explosión de la demanda en la creciente clase media china. Varios estudios anteriores, realizados en varios países, mencionan categóricamente que la creciente demanda de pieles de burro en China para el Ejiao ha dejado a la población mundial de burros en crisis.